Cepillos y queso: un tándem imprescindible

Los cepillos y los quesos son una unión que dan buenos resultados. La industria quesera necesita estas herramientas para mantener la calidad de su producción. Cuidar de las cortezas, por ejemplo, es indispensable para asegurar que cada rueda de queso llega en las mejores condiciones posibles. ¿Qué detalles hay que conocer?

Mecanización de la cepilladora y lavadora de quesos

La cepilladora y lavadora de quesos han contribuido a mecanizar parte del proceso de producción y a hacer que sea más eficiente, que la productividad sea mayor y que el control del resultado final se lleve a cabo con facilidad. Los consumidores son quienes, en última instancia, salen ganando con estas mejoras, ya que podrán disfrutar de quesos de una calidad fuera de toda duda.

Estas máquinas que se encargan de dejar a los quesos en perfectas condiciones. Cuentan con una canaleta para entrada de los productos, los cuales discurrirán por una cinta para que unos cepillos industriales cilíndricos eliminen cualquier suciedad que pueda estar presente. Así, la corteza queda en unas condiciones adecuadas para su comercialización, y finalizará el proceso sin ningún daño.

El cepillado siempre es motorizado, lo cual contribuye significativamente a mejorar la productividad. Estos giran sobre la superficie de cada queso para eliminar cualquier resto en la superficie. El proceso se realiza con gran precisión y suavidad, características clave para lograr unos resultados de primera calidad.

Cepillos técnicos del lavado de quesos

Los cepillos industriales para lavar quesos están especialmente diseñados para esta función. Son de tipo cilíndrico, pero con adaptaciones específicas. Por ejemplo, sus materiales tienen que ser aptos para interactuar con los alimentos, por lo que deben ser inertes. De esta forma, se impide la transmisión de enfermedades alimentarias y se reducen los daños que se puedan causar.

Además, no se utiliza cualquier filamento, ya que tiene que estar adaptado a la función que tiene que cumplir y el producto a tratar. En este caso, se utiliza poliamida compatible con el tratamiento de alimentos y se tinta de color azul para facilitar la identificación cualquier hebra que pueda llegar a desprenderse. Así, se retira con rapidez y no es necesario entorpecer la producción.

En cuanto a las bases de los cepillos, estas suelen ser de polietileno, ya que es un material compatible con la industria alimentaria. Se utiliza tanto en modelos de base maciza o de tubería, lo que permite aligerar esta estructura pero sin restarle resistencia.

El grosor de los cepillos es de término medio y se utilizan poliamidas de 0,30 para el rango de la sección y para longitudes de fibra de menos de 50 y 0,70 mm. Estas medidas están pensadas específicamente para el cuidado de los quesos y del tamaño que estos puedan tener. No obstante, es posible realizar adaptaciones puntuales.

En definitiva, los cepillos y los quesos se unen en la industria alimentaria. Cuidar al máximo la producción es crucial para garantizar la calidad del producto y la salud humana. En Cepillo Industrial se ofrecen los mejores cepillos. ¡Contáctanos ya!